Konus Audio Integrale 2000, la caja mágica

Cuando Eric Garcia , CTO de Artesanía Audio, vino a casa para grabar un vídeo de anécdotas en ferias internacionales de audio, no pudo resistirse a escuchar el sistema musical que tenía instalado en ese momento. Eric, persona acostumbrada a viajar a distintos continentes llevando la representación de la marca, de escuchar todo tipo de productos, calidades y... precio; no iba a dejar pasar la ocasión de probar el sonido de la sala.

Su curiosidad se incrementó a la máxima expresión con el diminuto amplificador integrado. Para él, es diminuto. Sus racks dan soporte a amplificadores y etapas de potencia de varias docenas de kilos cada uno. Su semblante al escuchar mover los altavoces de Jean Maurer era todo un spot publicitario.

Mi problema es transmitir con palabra escrita y con poca información las bondades de un producto que no vende imagen. No vende publicidad. Vive en la otra parte del mercado, ese que se mueve fuera de las esferas de conocimiento popular y se dirige a un sector muy especializado y conocedor del audio. Su sitio web es toda una declaración de intenciones, donde casi te invita a visitar a su distribuidor más cercano. No ofrece mucha información del producto, solo lo menciona y quiere convencerte de sus virtudes con la escucha y no con sus escritos. Sigo estando en el lado opuesto del señor Sead Lejlic, propietario de la firma, ya que mi labor es transmitir de forma escrita lo que las palabras no reproducen, la música. Eso se espera de mí, eso intentaré hacer.

No existe de forma pública, ni da más datos que los siguientes: 33 Watios en 8Ω, clase A/B. Vamos a aplicar la deducción lógica para ampliar, en la medida de lo posible, estos escasos datos. Evidentemente, también lo indica el fabricante, es un dual mono real. Indico que es real, ya que las conexiones traseras, tanto de entrada de señal, dos RCA; como de salida de altavoces, no están en la disposición "habitual", uno encima de otro, sino en cada lado del integrado, siguiendo una estética más propia de las etapas de potencia que la de los integrados. Todo ello, soportado y aislado por solo tres bases, no cuatro.

En el frontal, un potenciómetro sin ningún indicador visual de posición, un interruptor de palanca, para seleccionar una de las dos fuentes y un led superior rojo de estado. Nada más.

Vivimos en una época donde nos encontramos principalmente con dos tipos de integrados: los reconvertidos a Todo en Uno (AIO), con DAC, previo de phono, streaming, entradas de todos los tipos, etc., y los "falsos" minimalistas, es decir, aunque no disponen de todo lo anterior mencionado, son voluminosos, pesados, con cantidad de material incorporado para disipar el calor generado y buscando siempre una "buena fotografía" para satisfacer a sus futuros propietarios.

Konus Audio utiliza idéntico recinto exterior, tanto para sus integrados, dac's y previos de phono. Y solo dos colores de "fábrica". Cuando escriba sobre el DAC, la palabra minimalista ya se escribe en mayúsculas del todo.

Anécdota personal. Estuve experimentando distintas ubicaciones del integrado y del dac dentro del Exoteryc Pro rack, haciendo las correspondientes tomas de imagen y posterior visionado, para intentar encontrar la posición más atractiva. Finalmente, he optado por unirlos en el mismo estante para dar una mejor sensación de sistema completo.

Equipo utilizado en las pruebas

Fuente de sonido:
» Konus Audio Digitale 2000
» Roon Servidor
» Qobuz Studio
Amplificación de potencia:
» Konus Audio Integrale 2000
Altavoces:
» Jean Maurer JM320E
» RadioTehnika Giant FS-100N
Cables:
» Wires4Music en cableado:
    » Horus Hybrid interconexión RCA
    » Evolution en altavoces y red eléctrica
Rack HiFi:
» Artesanía Audio Exoteryc Rack PRO

He utilizado dos altavoces distintos, con perfiles sonoros también distantes entre ellos, para poder exprimir más posibilidades y llegar a unas opiniones más fundadas sobre mi experiencia personal.

Llegas a la sala oscura y se ilumina de golpe con su cantidad de información musical flotando en todo el ambiente. La claridad de las notas que se proyectan en sala y la separación instrumental es tan notoria, que en momentos delirantes, "ves" las corcheas y semicorcheas como te acarician los oídos, dejándote extenuado en el intento baldío de querer capturar toda la información que se emite entre esta combinación de elementos musicales.

Es dinámico, muy dinámico. Tanto los altavoces como el integrado han estado pensados para funcionar a toda velocidad. Esta característica puede no acabar de gustar a personas con el gusto muy condicionado por el sonido "acaramelado" de la amplificación valvular convencional. Tradicionalmente, se ha asociado este sonido con frialdad, no es cierto. No es lo mismo emitir gran cantidad de información musical, que esta suene metálica.

La extracción de información musical y su posterior presentación en la escena sonora es tan expresiva y detallada, poniendo el listón tan alto, que da algo de pereza salir de él. Tengo que insistir en que esta sinergia no es apta para todos los gustos. Quien prefiera líneas más gruesas en el sonido, menos definición a cambio de una mayor presencia de las notas dominantes para "simplificar" el mensaje sonoro, puede quedar algo aturdido. Todo son gustos y todos ellos respetables. Personalmente, sigo pensando que es una combinación ganadora de forma clara a la que voy a exponer a continuación.

Antes de conectarlo, conocía el sonido que podría obtener en todos los registros, excepto en el más bajo. Los agudos de estos altavoces son suaves, muy sencillos de manejar y los medios, agradables, con algo de coloración, no siendo muy analíticos sino más relajados en su interpretación. Donde han fracasado algunos amplificadores integrados de baja entrega en watios, ha sido en mover sus cuatro woofers. Proyectando el sonido en sala, pero percibiéndose este sin cuerpo alguno, falto de profundidad, dando una señal liviana que no se ajustaba a las necesidades de alguna pieza en concreto.

Y el Integrale 2000, con sus 33 watios, el de menor potencia que ha pasado en sala en todos estos años, no se perfilaba como su mejor pareja. Así que empecé con lo más difícil que se me pasó por la cabeza y me apetecía oír en ese momento:

La violinista, de origen georgiano y alemán, Lisa Batiashvili, nos interpreta la pieza "La danza de los caballeros", Op. 64. Con arreglos de Tamás Batiashvili para solo de violín y orquesta que es una simple maravilla. Si no la tenéis, comprarla, escucharla, hacer lo que sea para oír este resultado creativo.

Durante la interpretación, los timbales marcan el ritmo militar de la obra, forzando la respuesta de los altavoces y su capacidad de responder de forma adecuada. Es una pieza complicada de resolver bien, ya que el violín es enérgico en ejecución, con mucha intensidad en su interpretación, pero la marcialidad lo llena todo. Y siempre emerge victorioso de la contundencia de la escena con su dulce estridencia musical. Te hace disfrutar de verdad y lo vives con vehemencia cuando el resultado es satisfactorio.

Marca las carencias, en caso de existir, y... existieron. Integrale 2000 no se inmutó ni lo más mínimo, dibujando una escena sonora profunda y de muchos dB's de intensidad, que mis amados Radiotehnika no tenían la capacidad de seguir en su dinamismo. La danza de los caballeros descabalgó a uno de ellos. Vendrán otras batallas, otros escenarios. Con la frente alta, Radiotehnika se retira, Konus Audio lo ha superado. La vida sigue.

Olvídate de las características técnicas y de otras cosas que has creído aprender a lo largo del tiempo. No sirven. Y aún viene lo más duro: cuando escriba sobre el DAC Digitale 2000. A todas aquellas personas, aficionadas de verdad a la música y no a sus aparatos; que solo "aspiran" a tener algo realmente espectacular en su casa, en sonido y no en presencia, tienen que escuchar esto.

Desconfíen de mis palabras y de mis elogios. No se crean ninguno, solo lo que viene a continuación: "Deben de escucharlo con unos altavoces adecuados". El mayor error que se puede cometer con este amplificador integrado es basarse en su precio, pensando que añadiéndole unos altavoces de precio similar vas a conseguir el resultado óptimo. Incluso yo he defendido esta teoría en muchas ocasiones de forma general... aunque aquí no funciona. Por cada euro que vale este integrado, tendrás que gastarte, como mínimo, cuatro euros en el altavoz. Así, los dos, estarán en igualdad de condiciones.

Espero haber rellenado un poco el hueco que deja, a los aficionados, la web del fabricante. Él quiere que lo escuchéis, no quiere lectores sino oyentes. Yo tengo lectores que animo a ser oyentes.