Wilsoniano
Concluimos el capitulo anterior con una imagen de un reproductor DCS y comenzamos el actual con una foto de mi marca preferida en reproductores de CD y SACD como es Esoteric. Hemos empezado por las fuentes ya que suele ser el primer eslabón en la cadena de cualquier equipo, obviando los soportes físicos, se sobreentiende que sin una buena grabación da igual lo que añadamos a continuación porque difícilmente se podrá mejorar lo mediocre. Luego vendrán las electrónicas, cajas y demás complementos como son cables y filtros. En cuestión de transportes creo que la japonesa lo borda ya que incorpora unas mecánicas muy sofisticadas, pesadas y que rozan la perfección en el giro, reduciendo prácticamente a la nada los posibles errores de lectura. De hecho DCS incorpora en algunos modelos mecánicas de su gran rival, otra cosa es el tema de los DAC asociados y ahí es donde hay para todos los gustos.
En una de las salas había todo un “ejercito” de electrónicas, streamers y reproductores de Esoteric, tanto de la gama estándar como de la superior Grandioso y sus famosas mecánicas VRDS. Tanto por el nivel de ejecución, como por acabados y sonido estamos ante unas piezas que rozan la perfección absoluta
En cuestión de electrónicas el abanico que se nos ofrece es inmenso, desde amplificaciones de estado sólido o a válvulas, integrados o separados: previos, etapas de potencia monofónicas y estereofónicas, alimentación separada, etc. En la imagen otra marca de prestigio del imperio del sol naciente: Air Tight, con una etapa de potencia a válvulas ATM 3011R y en segundo plano una imagen de un previo. Para los amantes de emociones fuertes… el precio roza los 50.000 €.
Otra marca que goza del aprecio de numerosos aficionados es la norteamericana Mark Levinson, ahora propiedad del grupo Harman. En este caso presentaba su integrado con DAC. Nº 585 de 200 W. El precio al que es ofrecido en nuestro país es de 16.500 €. Personalmente, cuestión de gustos, prefiero la época donde la propiedad y dirección la llevaba su fundador Mark.
La norteamericana Mc Intosh es otra de estas marcas, todavía dentro de lo accesible, en sus "entry level", que cuenta con multitud de adeptos en todo el planeta, entre otras razones porque se puede constituir un completo equipo de altísima gama, sino de referencia, sin salir de la marca: plato, CD, amplificación, cajas, cables, etc. En nuestro país está fuertemente implantada en su representación y aunque es cuestión de gustos, a mi me encanta la estética inconfundible, combinación de colores y su famosa “pupila” azul. En el stand de la neoyorquina exponían numerosos modelos, destacando en este pedestal una de sus piezas más deseadas (la tercera por arriba) MC1.25KW monofónicas de 1200 vatios y cuyo precio oficial ronda los 40.000 €., la pareja, sin duda un “final del camino” para muchos de nosotros.
De todo buen aficionado es sabido que en este mundillo se dan cita filias y fobias sobre formatos, marcas e incluso dentro de las mismas marcas con distintos modelos. El caso es que hace una eternidad y en un viaje a Madrid tuve la ocasión de escuchar un equipo de PASS acompañado por unas Micro Utopia B y me fascinó. Mas adelante me hice con las cajas, pero entremedias, se cruzó la neozelandesa Plinius… y ay, la carne y más la del audiófilo, es débil. Así y todo Nelson Pass es un diseñador soberbio y en 2018 me acerqué ilusionado a su stand para poder ver y escuchar de primera mano alguna de sus electrónicas. Nada más cruzar el umbral, esta “torre” daba la bienvenida al sorprendido aficionado. Podemos apreciar diversos amplificadores de línea y de phono y abajo del todo, una etapa en clase A estereofónica de potencia limitada pero de exquisito sonido. En el interior había un equipo sonando acompañado de unas Wilson Sabrina.
Hablando de cajas y de filias… los que me conocen ya saben de mi devoción por Wilson Audio. Así que a nadie debe de extrañar que si me pierdo por algún evento relacionado con las audiciones, me puedan encontrar cerca de alguna de sus fabulosas cajas. Cierto es que algunos de los audiófilos con los que me he encontrado prefieren otro tipo de timbre, no pasa nada, para eso son los colores, lo que me cuesta aceptar es que digan que suena a “discoteca” Bueno, bromas a parte, aquí expongo una foto de una Alexia, pero desde un punto de vista menos usual, desde atrás y mostrando sus interioridades, bueno… todo lo casto que se puede mostrar en estos casos. La electrónica que las alimentaba era de la suiza Nagra, famosa por sus reputados magnetofones, pero cuyas electrónicas rayan la perfección.
Tal vez una de las salas más concurridas y en la que había que pedir hora para la audición era la de Gryphon Audio. De hecho pude tomar algunas fotos pero a la hora de poner en marcha la fantástica maquinaría sólo podían quedarse los afortunados que tenían cita concertada. Así y todo hay que quitarse el sombrero por el material expuesto, tanto en amplificación como en sus altísimas cajas y por lo poco que se podía escuchar desde afuera, pegando la oreja en la puerta, sonaba de auténtico escándalo. En la imagen se puede ver la etapa de potencia estereofónica Mefisto de la marca danesa, una pieza impactante ganadora de varios premios como referencia absoluta y que se recomienda vaya acompañada del previo Pandora de la misma casa. El precio algo más de 50.000 €., la vista invariablemente siempre se nos va a lo más caro...
Y hablando de precios y de llamar la atención… ¿Que me dicen de estos altavoces? Son de la casa Volya sobre una base de la germana Accuton y está totalmente pintada a mano con una técnica muy personal, el modelo se llama Bouquet y el precio, similar al de una pintura de museo… 120.000 €., no sabemos si se habrán vendido muchas, pero desde luego no dejan a nadie indiferente y, auna en una sola pieza, arte y sonido.
Continuará...
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© G. Cañellas