No Surrender
Las cosas claras desde el principio. Cuando analizas una versión cualquiera de un dispositivo, una de las partes necesarias es la comparación con la anterior para poder comparar las mejoras introducidas y/o características añadidas al mismo. Esto no lo vais a poder leer aquí, ya que este es mi primer contacto con un ZEN DAC y por lo tanto no tengo referencias anteriores de como era la versión 1. Podría buscar información en Internet y a partir de allí, hacer ver que sé de qué me hablo y repetir cosas que otros habrían dicho antes, pero esto dañaría la confianza que nos debemos mutuamente y por lo tanto, la verdad por delante. El trato que le voy a dar es como si no existiese una versión anterior.
En sus versiones abordables, iFi Audio nos presenta sus productos con todos los elementos necesarios para su correcta utilización, pero siempre en sus presentaciones mínimas, funcionales pero mínimas. Este caso no es una excepción y dentro de la caja del DAC/ PRE AMP venía incluido el DAC/PRE AMP, un cable USB v.3 robusto y apantallado entre los datos y toma eléctrica, cable RCA muy corto, adaptador DIN a miniDIN para auriculares y un poco de papel. Con lo cual, dos componentes que podrían pasar por esenciales no estaban. El alimentador de electricidad y el conector de 4,4 mm balanceado. Se puede vivir sin ello, desde luego. Y las primeras semanas con él así lo hice, dejando para el final, para el análisis más sesudo y más exigente, el uso de los componentes mencionados y que también disponía de ellos, ya que me los facilitaron aparte.
Controles frontales
iFi Audio ZEN DAC v2 dispone de dos botones frontales, Power Match (para ajustar la salida de auriculares a los ohmnios necesarios aproximados. Resumiendo, si utilizas auriculares intraaurales o similares, OFF), y TrueBass (aquí ya me ahorro los comentarios, siempre en OFF mientras sea capaz de distinguir un gato de un león). Potenciómetro para auriculares o para salida de señal en el caso de utilizarlo como previo de amplificador y no tenerlo configurado con salida fija (ajustable por switch en la parte posterior). Conexión DIN (6,3mm)no balanceada, para auriculares y finalmente conexión 4,4mm balanceada, también para auriculares.
Controles posteriores
Toma eléctrica a 5V, USB tipo B, RCA, switch para modificar la salida de señal de fijo a variable, y conexión DIN 4,4mm balanceada. En un primer instante me dio la sensación que las dos conexiones RCA estaban demasiado juntas la una con la otra, pero un segundo después reflexioné que dado el segmento de mercado al cual va dirigido, es más que correcto, ya que nadie va a utilizar cables desmedidos en un componente de este nivel. Y quien lo haga, necesita de una visita al psicólogo.
Consideraciones previas
Una vez leída las características técnicas de este componente y que pueden encontrarse en su web indicada al final de la review, una reflexión rápida.
IFI Audio posiblemente sea una de las empresas actuales más dinámicas a la hora de aplicar sus mejoras tecnologías a los productos de gama básica de la firma. De todos es conocido que la tecnología puntera actual será lo normal dentro de un periodo de tiempo relativamente corto, quizás dos o tres años. Hablando solo de intuición creo firmemente que ellos recortan este tiempo de forma exponencial, dando una calidad soberbia por un precio comedido en sus gamas básicas, algo que no siempre hemos tenido la misma sensación en la revista con sus modelos superiores.
Parte trasera de los altavoces con sus conexiones y controles.
En entorno de trabajo
Mientras escribo esto, estoy escuchando música en streaming con unos AKG K-701 conectados. Sin ningún tipo de complicación añadida, posiblemente este sea el entorno más natural de trabajo de este componente. Elegante, en espacio ocupa un poco más que la caja de un CD y un grosor de unos 3 apilados. En cualquier espacio de trabajo será más discreto y bello que los propios auriculares. Pero vamos a por la música sin más dilación. A finales de julio instalé en mi sistema Linux un reproductor del cual había leído en medios informáticos buenas referencias, el Médolie. Con las vacaciones, allí se quedó, pero ahora hemos vuelto al trabajo y empiezo a ponerlo a prueba. La interficie del software, así como su facilidad de uso hace de su aprendizaje un juego de niños. Comparé ese software con otro clásico, Strawberry utilizando el concierto que Simon & Garfunkel protagonizaron en Central Park de Nueva York cuando yo tenía muchísimo pelo en la cabeza. Finalmente el Mélodie ya está desinstalado de mi sistema. Y todo esto ¿a qué viene? Simple, pude notar la clara diferencia de Paul Simon entre un software a otro, es decir, el DAC me permitió comprobar que esas diferencias existían, siendo en el descartado mucho más saturadas y poco naturales, perdiendo esa modulación de la voz que hace que Simon no sea un simple cantante de la boca de un metro en cualquier ciudad del mundo. La búsqueda de la excelencia tiene fecha de inicio, pero no de final.
ZEN DAC comparado con CD's
La entrega de corriente a los auriculares es suficiente, por los pelos. Tengo que trabajar con ellos a un 75% de rendimiento y cerca del 90% la amplificación del mismo entra en periodos de saturación, por lo tanto, nada recomendable. Analicemos un poco más esto, dándole contexto. Yo no hago hojas de cálculo ni tesis doctorales de física, por lo tanto, es lógico que no utilice la música como ruido de fondo, sino que trabajo con ella, por lo tanto mi atención no esta tanto en la pantalla sino en los oídos, o sea que mi volumen de media es alto. Jugando un poco con el volumen y su rendimiento óptimo (no olvidemos que esta valoración va directamente relacionada con los auriculares utilizados) podría decir que hasta el 50% de potencia no tiene ni la más mínima complicación en mover las membranas de los auriculares, dando el máximo de su calidad.
iPOWER con sus complementos
Y ahora con el ifi iPOWER
Al principio del texto, hablaba que existían dos componentes que no iban de serie, este es uno de ellos, el transformador con cancelación de ruido eléctrico. Como no soy técnico voy a limitarme a comentaros el resultado que dicho aparato produce en el sonido. Se acuerdan de los porcentajes y tal que mencionaba en el párrafo anterior, intentando ser lo más detallado posible, pues los envían todos al carajo. Empieza la fiesta. Todo el potenciómetro es válido para el sonido, la claridad y nitidez aparecen con tal nivel de escándalo que maldigo el rato de mi vida, gastado inútilmente, escuchando este DAC sin el iPOWER. Por un tercio del precio del DAC lo multiplica por tres. Matemática fácil. Los crecendos musicales no quedan ahogados por falta de potencia, la batería se muestra suave y dinámica a la vez. La profundidad del sonido es real y la tridimensionalidad aparece de verdad. En “Fifty ways to leave your lover” esa batería vuela, dando un sentido especial al tema y las trompetas toman el protagonismo que siempre reclaman para ellas. Posiblemente sea el instrumento musical más vanidoso de todos, ya que no sabe pasar desapercibido. Y una petición especial para mis queridos lectores, digo lo que oigo; no me interroguen del porqué o la justificación de una mejora tan evidente en el sonido. Existe y es real.
Posteriormente el iFi Audio ZEN DAC v2 visitó el salón de mi casa y lo conecté con mi sistema habitual. Por un tema físico de posición del aparato tenía que prescindir de probar los cables RCA que se suministran por defecto (son muy cortos) o el cable USB v3 (que también es muy corto). Finalmente la conexión RCA la realicé con mis cables RCA Mogami con conectores Neutrik.
Detalle de los acabados del 4.4 to XLR
Ifi Audio 4.4 to XLR series
Y ahora aprovecho para presentar el último de los invitados a esta fiesta. Este es el nuevo cable de la firma para las conexiones balanceadas. Aquí ya tenemos una longitud adecuada, 1 metro, y unos acabados muy destacables. Con una presencia del mismo que te hace pensar en un primer instante, que puede ser “excesivo” para el invitado principal en cuestión. Además el precio me da la razón también, ya que desembolsar aproximadamente 100 € por un cable para un DAC de 159 € no tiene mucho sentido. Entre otras cosas porque seguramente, y esto queda en el apartado de suposiciones mías, no llegué a disfrutar con este cable lo que me habría podido dar en el iFi Audio iDSD Diablo.
Recientemente, Mr. Charlie Watts nos ha dejado. Y la típica negación humana te obliga a escuchar de nuevo su música como una forma banal de negar la evidencia, los The Rolling Stones ya no existen. De Bridges to Babylon selecciono “Anybody seen My Babe”. El sonido que entrega mi equipo es correcto, estrictamente correcto. Y es en este punto donde uno se da cuenta de forma clara de los límites. No es la primera vez que me ocurre algo similar, ya ha sucedido en otras ocasiones, pero nunca con tanta excusa como en este caso. Un poco de contexto para entenderlo todo mejor. Por mi casa han pasado DAC’s que multiplican por 50 el precio de este. He tocado el cielo o me he acercado bastante a él, pero al mismo tiempo, con este nivel de precios, me había alejado mucho de la tierra. Es por este motivo que si yo utilizase la misma prosa con la cual he descrito ciertas experiencias podría dar a engaño entre los lectores, y esto es exactamente lo último que haría. Por este motivo, poder decir que ha sido capaz de mantener el listón alto y alejarse del ridículo, en un sistema exigente creo que es la mejor de las descripciones que puedo hacer del ZEN DAC v2.
Conclusiones
Es difícil por este precio mejorar las prestaciones del iFi Audio ZEN DAC v2. Simple y contundente. ¿Qué le diría a mi mejor amigo sobre este producto? Si quieres trabajar con el ordenador o portátil y al mismo tiempo conectar unos buenos auriculares mientras trabajas, esta es una opción buena. Si añades el iPOWER subes de golpe el nivel de calidad del sistema, ya que no suman, se multiplican. Si lo quieres para tu sistema principal, es apto para sistemas básicos, siempre con el iPOWER, y puedes ahorrarte el cable 4.4 to XLR Series, ya que es innecesario con esta combinación.
Finalmente, para los entusiastas del MQA decir que la reproducción de este tipo de archivos está más que garantizada con su batería de núcleos (16). No soy nada amante de la filosofía que conlleva el MQA, y lo ignoro tanto como puedo. Sed comprensivos conmigo.
Todo conectado
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