El amigo opina
Saludo y presentación
Lo lógico hubiera sido presentarme primero, aunque sea de todos conocido en el foro por los correos intercambiados, pero haciendo uso de aquel axioma matemático, el orden de los factores no altera el producto.
Esta sección nació como respuesta al ofrecimiento del amigo Josep, no sin pocas dudas por mi parte, pues visto el nivel de la mayoría de contertulios, voy a tener que elevar bastante el listón para estar a la altura. Si no es así, cuanto menos trataré de ayudar a los menos conocedores o más recientes aficionados al audio de calidad. Y los más cualificados, que haberlos haylos entre este grupo de amigos, que con sus críticas (por favor, siempre constructivas) colaboren para que el resto aumentemos nuestros conocimientos.
¿Por qué EL AMIGO OPINA? Pues en este grupo de amigos ni pretendemos ser expertos ni responder a nadie iluminándolo con la verdad. Simplemente somos eso, un grupo de amigos opinando sobre audio y tratando de ayudarnos mutuamente. Por supuesto que esa opinión es particular y por tanto subjetiva, como casi todo en esta vida, pero al menos todos los que formamos este grupo de amigos lo vemos desde el punto de vista del aficionado, nunca del comercial o profesional, por lo cual a pesar de dicha subjetividad siempre será más imparcial y desde un punto de vista común, que aquellos que se deben a otros intereses.
A modo de introducción, aún a riesgo de que abandonen la lectura de este audio-melo-pesado en este párrafo, quiero exponer los avatares de lo que ha sido hasta hoy mi devenir por el placer de la escucha musical.
Debido a las circustancias (poderoso caballero es don dinero) no tuve un sistema de reproducción medianamente decente hasta que a los catorce y aprovechando un viaje a centroeuropa (en aquel entonces se encontraban cosas mejores y más baratas que en este país), con mis pequeños ahorros adquirí un tocadiscos, de aquellos autoamplificados, que con unos ligeros retoques de bricolaje casero en los altavoces pude ganar en graves, y pese a lo modesto del sistema, en aquel tiempo no me paraba a pensar en calidad y simplemente apagaba las luces y me dejaba transportar por la música. De aquel primer sistema sólo me queda un mal recuerdo, pues cuando empezaba a disfrutar de la música, sin otras preocupaciones, lo perdí en un robo doméstico.
Aunque no hay mal que por bien no venga, aquel incidente acabó poco después (lo que hace un padre por no aguantar al pesado de un hijo) con la llegada a casa de lo que fue mi primer sistema de alta fidelidad, al menos eso es lo que hay en la inmensa mayoría de hogares, pues no dejamos de ser unos locos excentricos en busca de un imposible, siempre que el bolsillo lo permita. Aunque algo más conocedor del mundillo de la alta fidelidad, también disfruté del mismo enormemente sin pararme a estudiar más detalles de acondicionamiento acústico, cables, etc. De aquel entonces aun conservo un plato Thomson de brazo tangencial, que no utilizo y posiblemente para mi desgracia...
El destino me trajo a los 21 de Málaga, mi tierra natal, a Gran Canaria, mi segundo hogar después de más de doce años, donde me han acogido estupendamente como no podía ser menos de esta maravillosa gente. Y aquí, con mi primer empleo estable y las malas compañías de otros locos por la música y la reproducción de calidad, es donde terminé de perderme, para deleite de mis oídos.
Actualmente, con 34 años (un chaval a buen seguro para muchos amigos) no soy ni pretendo ser un profesional en la materia, sino un simple aficionado. Eso sí, curioso e impaciente que no se conforma con lo que tiene, culturalmente hablando, y gusta de indagar, experimentar y en definitiva conocer siempre más sobre este fascinante mundo del audio de excepción, sea conversando con gente más experimentada o conocedora del tema, leyendo libros y artículos, asistiendo a audiciones, cacharreando con aparatos, etc.
Desde luego hoy día escuho la música con mucha mejor calidad que con aquel primer tocadiscos, e incluso siempre que pueda como hacemos todos los enganchados a esta droga psíquica, aspiraré a más, pero aunque disfrute igualmente, no creo que fuese mucho menos cuando en aquel desconocimiento de tanto dato técnico escuchaba mi música predilecta en ese primer modesto tocadiscos.
Un saludo a todos los amigos.
Canal Telegram o Canal WhatsApp. No te pierdas ninguna novedad de la revista.